First day of my life - Bright Eyes ¿Te acuerdas? Tú y yo en un tren. El mundo era suficientemente pequeño como para sentirlo latir bajo nuestros pies, y lo suficientemente grande como para descubrir en él un sitio en el que perdernos cada día. Aquella luz que mezclaba amaneceres con atardeceres y que bañaba todo de dorado haciendo que las calles ardiesen. Aquel reloj que marcaba las horas y que deseábamos parar y despertarnos cada mañana con el comienzo de un día infinito. Aquella sensación de no necesitar más de lo que llevábamos encima. De buscar en esos rincones los anhelos olvidados. Esas vías de tren, esas carreteras en las que nos perdíamos con la complicidad como equipaje. Ese olor a libertad, a verlo todo tan fácil. Sin rumbo fijo. Esos ideales y esas ganas de abandonar lo burdo, la rutina y d...